La cara es el espejo del alma y las cejas juegan un papel muy importante en nuestro rostro al dotarlo de expresión y enmarcar tu mirada ¿Quién no desea lucir unos ojos perfectos y una mirada atractiva? En ocasiones, el paso de los años, la genética o una excesiva y mala depilación, pueden haber estropeado tus cejas. Actualmente, las cejas pobladas son una tendencia en auge y, gracias al microblading, están a nuestro alcance.
¿QUÉ ES EL MICROBLADING?
Se trata de una técnica de maquillaje semipermanente que permite lucir unas cejas más gruesas, sin perder su naturalidad. Este procedimiento proviene de una técnica de tatuaje tradicional japonés que consiste en dibujar vello a vello con una pluma de metal parecida a un pequeño bisturí. Esta pluma introduce en la epidermis pigmentos inorgánicos con base mineral.
Es aconsejable acudir a un profesional experto en diseño de cejas, para que te recomiende la forma que más se adapta a tus facciones. Independientemente de las tendencias, las cejas deben tener concordancia con tu rostro para conseguir su objetivo: enmarcar la mirada y aportar equilibrio al rostro. Por este motivo, el grosor y la forma de las cejas es algo tan personal, es preferible no imitar otras cejas simplemente porque nos gusten.
Aunque el microblading no es definitivo, su duración puede ser de hasta un año. Por lo que es recomendable realizar una simulación antes de realizar el tratamiento para asegurar un buen resultado. También es importante escoger el pigmento más adecuado para ti, teniendo en cuenta el color de tu pelo natural, de tu piel y de tus ojos.
MICROBLADING Y MICROPIGMENTACIÓN ¿EN QUÉ SE DIFERENCIAN?
El microblading y la micropigmentación son dos técnicas de maquillaje semi y permanente para las cejas. Las principales diferencias son:
Micropigmentación. Se realiza con un instrumento llamado dermógrafo, con una aguja de una punta para dibujar el pelo y una aguja de tres a cinco puntas para sombrear o rellenar. Se utilizan pigmentos hipoalergénicos formados por partículas muy pequeñas, en base de aceite. Estos pigmentos se depositan en la epidermis.
El tratamiento se puede realizar en otras zonas del cuerpo como ojos, cejas, labios, capilar, etc. Tiene una duración más larga, de uno a cinco años, e incluso puede ser permanente, siempre dependiendo del tipo de piel, de la edad y de los cuidados aplicados. A veces, es necesario realizar un retoque del color después de 12 o 18 meses.
El microblading se realiza con una pequeña pluma de metal llamada tabori. Con ella se hacen micro-cortes en la piel, donde se depositan los pigmentos. Esta pluma es tres veces más fina que las agujas utilizadas para la micropigmentación y el tatuaje. Con la creación de la ceja pelo a pelo, el microblading consigue resultados muy naturales. Los pigmentos se depositan en la capa basal de la epidermis y su duración es más corta, de un año o año y medio. Es la técnica más novedosa.
CUIDADOS DESPUES DE UN TRATAMIENTO DE MICROBLADING
Para obtener un buen resultado después de someternos a un tratamiento de microblading, es muy importante llevar a cabo una serie de cuidados durante 10 días aproximadamente:
- Lava la zona tratada de forma habitual con agua y jabón.
- La zona debe ser hidratada a menudo. Utiliza una crema especial y específica para este tipo de tratamientos.
- Se debe evitar hacer ejercicio al menos dos días, de esta forma el pigmento no se verá afectado por el sudor.
- Aunque te salgan pequeñas costras, no rasques ni frotes la zona pigmentada porque puede perjudicar la fijación del pigmento.
- Se debe evitar tomar el sol o realizar sesiones de rayos uva.
- No es recomendable bañarse en piscinas o el mar, al menos durante una semana o dos.
- También es muy importante evitar tocarnos las cejas con las manos sucias. Así evitaremos infecciones.
- Evita también maquillarte durante el proceso de curación.
Como ves, las medidas de precaución son parecidas a las de cualquier tipo de tatuaje.
Sigue estos consejos durante 10 días y presume de mirada.
TERESA PÉREZ
Equipo de blogueras de Sesshin